
De Alumno Ejemplar EL DEBATE 2012 a médico recién egresado de la UdG

Fernando Gil fue el estudiante más sobresaliente de la generación 2012-2018 de la carrera de medicina en la Universidad de Guadalajara. Foto: EL DEBATE
Los Mochis, Sinaloa.- En el año 2012, Fernando Gil López ganó el premio de EL DEBATE como Alumno Ejemplar de nivel bachillerato al finalizar la preparatoria en el Colegio Mochis.
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Su gran dedicación y empeño en sus estudios y en todo aquello que le apasiona lo han llevado a conseguir sus sueños. Como muestra de ello es que el pasado 31 de julio terminó su carrera como médico, cirujano y partero en la Universidad de Guadalajara. Es así como EL DEBATE, después de seis años de haberlo galardonado, se ha convertido también en testigo de los logros de este mochitense sobresaliente.
Reconocimientos
El 11 de diciembre del año pasado, la Universidad de Guadalajara le otorgó un reconocimiento como estudiante sobresaliente del Centro Universitario de Ciencias de la Salud, como médico, cirujano y partero, por su excelente desempeño académico.

Fernando Gil ha ido acumulando éxitos como fruto de su gran esfuerzo, disciplina y constancia. El pasado 2 de agosto, en el Auditorio de la Academia Nacional de Medicina, en la Ciudad de México, el joven de apenas 24 años de edad recibió uno de los reconocimientos más anhelados por los estudiosos de la salud. El Instituto Científico Pfizer lo reconoció por su excelencia académica como estudiante de medicina.
“Es un premio que se otorga a un egresado de cada Facultad de Medicina del país de forma anual y es una colaboración entre el Instituto Científico Pfizer y la Asociación Nacional de Facultades y Escuelas de Medicina. Y el simple hecho de haber sido reconocido en la Academia Nacional de Medicina, que es el recinto más importante en cuanto a la academia médica, pues es un sueño para mí, algo que nunca me imaginé”, comentó el joven médico.

Consciente del gran apoyo incondicional que le ha brindado su familia, es a quien dedica este reconocimiento.
Modelos a seguir
Fernando Gil López decidió estudiar medicina al ver a sus tíos políticos, los médicos cirujanos Mario González y Eduardo Monjaraz, ejercer esta actividad. “Desde muy chico, tenía yo entre 14 y 15 años cuando me llamaba la atención este ámbito de la salud. Me surgió la idea de pedirles que me permitieran acompañarlos para ver los procedimientos a los que se dedicaban, y de ahí surgió mi interés. Desde entonces supe que era a lo que me quería dedicar”, mencionó.
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Expuso que le gustaría especializarse en las áreas de la hematología o la infectología.
“Para realizar cualquiera de estas subespecialidades primero se requiere un entrenamiento en medicina interna, que es prácticamente toda la enfermedad del adulto.”
Invitación
Fernando Gil invitó a los estudiantes para que se inscriban en el concurso Alumno Ejemplar EL DEBATE. “Hace seis años participé en el concurso Alumno Ejemplar EL DEBATE. Mi mamá vio el anuncio y me invitó a que me inscribiera. Estos reconocimientos son bienvenidos y es muy importante que EL DEBATE siga impulsando y motivando a la gente joven a que vean que sí se puede”.
Agradecemos a EL DEBATE
Muy orgullosa de sus dos hijos, Fernando y Uriel Gil López, Francisca recordó cuando su hijo Fernando ganó el concurso Alumno Ejemplar EL DEBATE 2012.

“Cuando Fernando salió de la prepa, yo vi el anuncio de este concurso en el periódico y dije: pues de aquí somos, y me puse a reunir todos los documentos para llevarlos a EL DEBATE, hasta reconocimientos de deportes llevé, porque a mis hijos les ha gustado mucho el deporte. Yo junté papeles de todos los habidos y por haber, y a mi hijo le encantó la idea, y grande fue nuestra sorpresa cuando vimos que salió ganador”, comentó Francisca López.
Muy entusiasmada, agregó que sus hijos siempre han sido excelentes alumnos, pues siendo ella maestra de primaria, se propuso que ellos destacaran siempre en sus clases.
“Cuando mis hijos estaban chicos, yo trabajaba mucho todo el día dando clases, pero yo dije que todo lo que ganara como maestra sería para que ellos estudiaran en una buena escuela. Me propuse como maestra que mis hijos supieran leer desde muy chicos, a los cinco años mis dos hijos estaban leyendo”, comentó.
Disciplina
Agregó que sus hijos al entrar al kínder del Colegio Mochis, le preocupaba pensar que sus hijos no entrarían leyendo como suponía entrarían los demás niños; sin embargo, expuso que se llevó una sorpresa al darse cuenta que eran los únicos niños que sabían leer.
“Para mí era mucho orgullo que ellos aprendieran a leer desde los cinco años. Desde entonces, mis hijos siempre han llevado muy buen nivel”, expresó.
Destacó que gracias al apoyo de su esposo, Fernando Gil Ornelas, sus hijos lograron convertirse en niños entregados a la escuela y responsables en sus actividades, pues él se hacía cargo de ellos cuando ella daba clases.
“Mi esposo me ayudaba mucho con ellos, con las tareas, recogerlos y llevarlos a la escuela. Yo estaba en la escuela metida todo el día. Le confié mucho la responsabilidad a él e hizo un gran trabajo. Sin ese apoyo no hubiera sido lo mismo”, comentó.
Por último, felicitó a EL DEBATE por el concurso Alumno Ejemplar, con el cual, dijo, se impulsa a los estudiantes a seguirse preparando.
“Es muy bonito que estos concursos de periódico EL DEBATE impulsen a los alumnos y apoyen a la educación. Nosotros estamos muy agradecidos con EL DEBATE. Y quiero recordarles que el alumno que impulsaron aquí está poniendo en alto el nombre del estado y de la ciudad de Los Mochis.”

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